A pesar de la fuerte campaña por la abstención realizada por los partidos de oposición en Venezuela, los electores y electoras comparecieron masivamente a los centros de votación. En Caracas, la ciudad permaneció dividida en dos: del lado oeste, secciones electorales abarrotadas por el pueblo; del lado este, donde se concentraron las manifestaciones opositoras al gobierno de Nicolás Maduro que ocurren hace más de tres meses, las calles estuvieron vacías hasta el inicio de la tarde.
La concentración de la oposición en la plaza Francia del barrio Altamira solo empezó poco después del mediodía, aunque estuviesen prohibidas según la ley venezolana que, así como la brasileña, prohíbe manifestaciones políticas durante los períodos de votación.
Por las redes sociales, se viralizó un video de un ataque terrorista con bomba perpetrado por los grupos de oposición contra un convoy de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), dejando siete oficiales heridos con quemaduras de segundo y tercer grados, y otros cinco civiles con heridas leves.
Asimismo, alrededor del mundo, fue creada una matriz de opinión, por los medios comerciales, que buscó transformar las protestas puntuales en caos generalizado, para deslegitimar el proceso constituyente en Venezuela.
El País, de España, tituló: "Violencia y abstención en la Constituyente de Maduro". En el momento de la publicación, el Consejo Nacional Electoral ni siquiera había divulgado el primer balance sobre la participación en la votación.
La tapa del diario argentino Clarín reproducía una foto del ataque terrorista de la oposición con el título "En Caracas: entre gases, represión y grupos parapoliciales", en referencia a la Guardia Nacional Bolivariana.
El New York Times dijo: "La violencia marca la elección de la Asamblea Nacional Constituyente en Venezuela". El periódico menciona la explosión que ocurrió en una de las principales calles de Caracas", pero no revela los responsables.
La Folha de São Paulo, de Brasil tituló: "Con barricadas, Caracas tiene votación con pocas filas". El periódico cubrió dos o tres barrios de la capital, sin considerar las enormes filas formadas alrededor ni otros centros de votación en otras regiones de Caracas y del país, y hablando de una 'toma' que, convocada por la oposición bajo ese nombre, nunca se realizó.
La agencia EFE de noticias publicó en una red social: "Agente herido tras la explosión de dos motos de la Policía en Caracas", ignorando que la explosión fue causada por la bomba colocada por grupos de la oposición.
Todos los titulares caminaban en la misma dirección: la creación de una matriz de opinión articulada por la prensa internacional, lo que revela una intencionalidad política con el objetivo de incitar internamente a los sectores de la oposición a seguir con la resistencia al proceso democrático popular y externamente, incentivar una intervención extranjera en un país soberano.
"Ningún gobierno del mundo tiene el derecho de no reconocer la voluntad del pueblo, la soberanía popular. Este pueblo existe, tiene alma, tiene consciencia. Y hay que respetarlo", destacó el ex vicepresidente de la República y coordinador de la Comisión Presidencial Constituyente, Elías Jaua, frente a la estrategia mediática y política internacional.
Poliedro de Caracas: donde votó el pueblo del este
La prensa internacional se quedó solamente con la imagen generada por los grupos de la oposición en regiones específicas de la capital y en otras pocas ciudades del país. Seguramente no les quedó tiempo para mirar las largas filas generadas afuera del Poliedro de Caracas (el mayor centro de votación, habilitado para recibir los electores de las zonas de protesta). Pero el análisis de la imagen debe tener en cuenta un elemento: los electores que comparecieron al gimnasio localizado en la región sudeste de la ciudad eran precisamente los habitantes del este de la capital, que no pudieron votar en sus respectivas secciones electorales, impedidos por los grupos violentos de la oposición.
La votación en el Poliedro fue una novedad en el proceso electoral de Venezuela. Representa una respuesta del Consejo Nacional Electoral a las amenazas y a los llamados a la violencia de los grupos de la oposición, activando un plan de contingencia para permitir a los electores de las zonas de conflicto ejercer su derecho al voto.
Brasil asume la política externa de la hipocresía
Alineado con los gobiernos más a la derecha y tan impopulares como el suyo, el gobierno brasileño arremetió contra la soberanía de Venezuela tras la realización de la elección por la Asamblea Nacional Constituyente (ANC). Con citas de una columna en el periódico Folha de São Paulo, el diario venezolano El Universal reprodujo las palabras del canciller del gobierno de Michel Temer, Aloysio Nunes. El afirma que la ANC es una maniobra del gobierno de Nicolás Maduro. Justo él, canciller de un gobierno elegido sin votos, producto de una maniobra política golpista.
Aloysio Nunes dijo estar 'indignado' con la represión a los manifestantes venezolanos y defendió la 'reconstrucción de Venezuela'. El ministro brasileño que en otro momento defendió la renuncia del presidente Nicolás Maduro y la realización de elecciones directas, parece recomendar a Venezuela las mismas salidas que defienden los movimientos populares de Brasil para la grave crisis que el país enfrenta, desde que la derecha brasileña resolvió adoptar métodos antidemocráticos y retirar de la presidencia una presidenta elegida democráticamente, para poner en el poder un gobierno que hoy en día tiene menos de 5% de popularidad.
Fuerzas Armadas Bolivarianas: "Respeten la voluntad popular"
Tras el fin de la votación, el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, realizó un comunicado de prensa, en el cual destacó la alta participación popular en la votación por la Constituyente y el éxito del Plan República, operación de seguridad realizada para el control del orden público durante los últimos 25 procesos electorales en Venezuela.
"Estaba en juego la soberanía de la patria. Cuando eso ocurre, encuentran las Fuerzas Armadas en pie", afirmó. "Sabemos el camino que queremos recorrer, y es el camino de Bolívar, de la independencia, del derecho de ser libres".
López confirmó la muerte de un oficial de la Guardia Nacional Bolivariana en el centro de votación en la ciudad de Mérida, en el oeste del país. Al referirse a los llamados de insurrección realizados por la oposición, dijo: "Dejen de hacer llamados a las Fuerzas Armadas. Tenemos consciencia suficiente del rol de las Fuerzas Armadas en estos dieciocho años."
Y también envió un mensaje a los países que insisten en la intervención en los asuntos internos de Venezuela: "Hago un pedido a los países de todo el mundo: respeten la voluntad popular".
Edición: Simone Freire | Traducción: Luiza Mançano