Los ríos e igarapés [pequeños ríos] que serpentean en el municipio de Barcarena, estado de Pará, en la región Norte de Brasil, están contaminados por metales tóxicos provenientes de residuos de una de las presas de la empresa minera Hydro Alunorte, del grupo noruego Norsk Hydro. Esto el lo que afirma el segundo informe técnico presentado este miércoles (28) por el Instituto Evandro Chagas (IEC), asociado al Ministerio de Salud del país.
El análisis de las aguas del río Pará sorprendió al químico Marco Marcelo Oliveira Lima, investigador en salud pública de la Sección de Medio Ambiente del Instituto. El informe comprueba los altos niveles de aluminio, a pesar del gran volumen de agua del río.
"Estamos hablando de toma de muestras en el río Pará, donde hay un volumen de agua muy grande, con gran capacidad de dilución. Pero en este río, en otros ríos y playas de la región, los niveles de aluminio y hierro aumentaron tras el derrame".
Lima afirma que el río Pará es uno de los más investigados por el instituto y señala que nunca se había visto un resultado con niveles tan elevados como se observó en este último análisis.
En las muestras recolectadas en el río Murucupi también fueron encontrados niveles de aluminio, hierro, arsénico, cobre, mercurio y plomo por encima del nivel permitido por la legislación. El instituto responsable por la investigación advierte que las aguas del río no son aptas para el consumo humano, recreación o pesca.
Ante los nuevos resultados, el instituto recomienda que la empresa siga abasteciendo agua potable a las comunidades afectadas hasta el final de periodo de lluvias en la región.
Comprenda el caso
Los problemas en el ambiente y en la salud causados por la actividad minera en la región metropolitana de Belém, capital de Pará, son antiguos. El Movimiento por la Soberanía Popular en la Minería (MAM) observó los primeros casos de aumento de enfermedades respiratorias y dermatológicas en la población local en 2001.
A lo largo de los años, se averiguaron casos de mortandad de peces, nubes de humo, contaminación de pozos de agua y de ríos relacionados con rupturas en las tuberías, derrames de aceite y emisión de productos químicos en el agua.
Desde 2017, se exacerba el conflicto entre las comunidades del municipio de Barcarena y la empresa Hydro Alunorte, que hace cuatro décadas está presente en la región.
El 17 de febrero de este año, hubo una fuga de relaves mineros, contaminando el ambiente y poniendo en riesgo la salud de las comunidades rurales. Tras los primeros análisis realizados por el Instituto de Investigación Evandro Chagas que revelaron la contaminación del agua, la Fiscalía, el Ministerio Público de Pará y la Defensoría del Pueblo recomendaron el bloqueo de una de las presas de la Hydro Alunorte, pues concluyeron que la empresa no poseía una licencia ambiental para operarla.
Un nuevo derrame en uno de los canales del río Pará fue descubierto el 9 de marzo. Después de una audiencia pública realizada el 22 de marzo, se determinó que la empresa minera sería la responsable por la atención de salud y abastecimiento de agua a los miembros de las comunidades afectadas.
En este contexto de conflicto, el líder popular Paulo Sergio Almeida Nascimento, de 47 años de edad, uno de los directores de la Asociación de Caboclos*, Indígenas y Quilombolas** de Amazonía, asociación que representa a las comunidades ancestrales locales, fue asesinado a tiros en el municipio de Barcarena. Este es el segundo asesinato en menos de tres meses.
* en Brasil, mestizo de blanco con indio
** asentamientos rurales de población mayoritariamente negra, creados inicialmente por negros esclavizados que se fugaron
Edición: Camila Salmazio | Traducción: Luiza Mançano