El miércoles último por la mañana (18), los presidentes de las centrales sindicales brasileñas visitaron el campamento Lula Libre, localizado en las proximidades de la Superintendencia de la Policía Federal en la ciudad de Curitiba, donde, desde hace diez días, el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva cumple prisión provisional por orden del juez de primera instancia Sergio Moro. En la ocasión, los dirigentes anunciaron que realizarán un acto unificado el 1° de mayo, Día Internacional de los Trabajadores, en el centro de la ciudad, capital del estado de Paraná, en la región sur de Brasil.
Siete centrales sindicales han decidido realizar un acto nacional conjunto por primera vez para denunciar la condición de preso político del ex presidente Lula. La manifestación será organizada por la Central Única de Trabajadores (CUT), Intersindical, Fuerza Sindical, Central de Sindicatos Brasileños (CSB), Nueva Central, Central de Trabajadores y Trabajadoras de Brasil (CTB) y Unión General de Trabajadores (UGT).
Para el presidente de la Central Única de Trabajadores (CUT), Vagner Freitas de Moraes, la unidad de la izquierda y de las centrales sindicales es necesaria, aunque haya diferencias en algunos temas. “A pesar de los diversos matices de pensamiento en las centrales, lo más importante, lo que nos unifica, es la lucha por los derechos de los trabajadores, por la democracia y por el derecho de Lula a ser candidato. Quien debe decidir si Lula será o no el próximo presidente de Brasil es el electorado”, afirmó durante la visita al campamento.
Lula es candidato presidencial por el Partido de los Trabajadores (PT) y lidera las encuestas de intención de voto. Conforme datos publicados este domingo (15), de la encuesta realizada por el Instituto Datafolha, Lula aparece con 30 y 31% en diversos escenarios, siempre al menos doblando a su inmediato sucesor.
Edición: Júlia Rohden || Traducción: Luiza Mançano