Integrantes de movimientos populares en Brasil comienzan una huelga de hambre por la libertad del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva este martes (31). La movilización no tiene una fecha límite y tendrá lugar en la ciudad de Brasília, capital del país. Participan de la huelga seis militantes de tres organizaciones: Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), Movimiento de Pequeños Agricultores (MPA) y Central de Movimientos Populares (CMP).
“Vamos a empezar un proceso que consideramos necesario e histórico para la coyuntura de Brasil. Se trata de un esfuerzo aún más grande de la sociedad brasileña con un objetivo principal: liberar a Lula. Creemos que él es inocente y está siendo víctima de una persecución política que se volvió explícita durante este proceso. Quieren impedir que sea candidato en las próximas elecciones”, afirmó el dirigente del MST, João Pedro Stedile.
Stedile y los seis huelguistas realizaron una conferencia de prensa este lunes (30) en Brasília, donde está localizada la sede del Supremo Tribunal Federal, órgano que puede decidir liberar a Lula. Los huelguistas permanecerán frente al STF algunas horas por día.
Los seis huelguistas son Jaime Amorim, Vilmar Pacífico y Zonália Santos, del Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), Fray Sergio Antonio Gorgen y Rafaela Alvez, del Movimiento de Pequeños Agricultores (MPA); y Luiz Gonzaga (alias Gegê), de la Central de Movimientos Populares.
Para Fray Sergio, la medida, más allá de ser una medida extrema, hace referencia simbólicamente al hecho de que el país volvió a sufrir por el hambre debido a las opciones del gobierno golpista de Michel Temer, del Movimiento Democrático Brasileño (MDB).
“Nosotros podemos pasar hambre por un gesto consciente de lucha, pero si continuamos con este modelo de país, el hambre será una imposición para muchos brasileños y brasileñas. Para el pueblo, el símbolo de la esperanza para cambiar esta situación es Lula”, complementó.
La huelguista más joven, Rafaela da Silva Alves, del MPA, dijo, conmovida, que todas las formas de lucha son necesarias. “Cada momento de la historia exige de los militantes y luchadores del pueblo algún nivel de sacrificio”.
Edición: Thalles Gomes | Traducción: Luiza Mançano