Se instauró el último jueves (1º) una investigación en el ámbito de la Policía Federal para averiguar indicios relacionados a una supuesta organización criminal que estaría actuando para impedir la aclaración del asesinato de la concejala Marielle Franco y de su conductor Anderson Gomes.
Los dos fueron asesinados en marzo de este año, en la ciudad de Rio de Janeiro, en circunstancias que todavía no han sido debidamente elucidadas. Desde el comienzo de la investigación, se sospecha que se trata de una ejecución, pero se mantiene en sigilo.
La petición fue realizada después que la Fiscalía obtuvo dos declaraciones de testigos que hablan sobre una articulación criminal entre agentes públicos de diversos órganos estatales, paramilitares y contraventores para impedir obstruir la investigación del caso, impidiendo saber quienes son los ejecutores y los autores intelectuales de este doble homicidio.
Algunos agentes de la Policía Federal ya actuaban en el caso, pero solamente como auxiliares. Actualmente, la investigación está a cargo de agentes de la Policía Civil y de la Fiscalía General del estado de Rio de Janeiro.
En los últimos meses, una desavenencia entre las diferentes instituciones impidió una articulación conjunta más amplia alrededor del caso porque las autoridades de Rio de Janeiro habrían rechazado el apoyo de la Policía Federal. El argumento es que se trataría de una intervención indebida en el trabajo local.
Según Raul Jungmann, ministro de Seguridad Pública, a partir de ahora, con la instauración de la investigación en la Policía Federal, el caso pasa a ser investigado en las vías oficiales y paralelas, es decir, no se trata de una federalización del caso, lo que excluiría la actuación de los órganos estatales.
El caso de doble homicidio es observado por diversas organizaciones nacionales y extranjeras, entre ellas, Amnistía Internacional. También es supervisado por un grupo de parlamentarios que integran una comisión externa creada en la Cámara de Diputados del estado para acompañar las investigaciones en Rio de Janeiro.
En entrevista con Brasil de Fato, el coordinador de la comisión, el diputado Jean Wyllys, del Partido Socialismo y Libertad (PSOL), comentó el anuncio de la instauración de la investigación federal:
“Todo lo que pueda contribuir para contestar las tres preguntas que hay que contestar, es decir, quien mandó matar a Marielle, quien la mató y por qué, es bienvenido. Toda la sociedad quiere saber. La gente no quiere que las investigaciones se extingan ni que se presenten chivos expiatorios como culpables solo para responder a la presión popular. Nosotros queremos la verdad”.
Según el diputado, la próxima semana, la comisión externa volverá a discutir la cuestión de la federalización del caso. La idea es votar una petición de la diputada Maria do Rosário que exige el cambio de las competencias en la investigación.
Edición: Diego Sartorato | Traducción: Luiza Mançano