El ministro Alexandre de Moraes asumió como presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil la noche del martes 16 acompañado de un grupo de autoridades de los Tres Poderes y de un discurso indigesto para el ala bolsonarista. El ministro, que estará a cargo de las elecciones de este año, prometió una actuación "firme e implacable" al frente de la Corte, la máxima institución que rige todo el proceso electoral en el país.
"La intervención de la Justicia Electoral será mínima, sin embargo, será pronta, firme e implacable a fin de frenar las prácticas abusivas o la difusión de noticias falsas o fraudulentas, especialmente las que se esconden en el cobarde anonimato de las redes sociales, las famosas fake news", dijo Moraes, haciendo un guiño a las milicias digitales que actualmente están en la mira del TSE.
El discurso del ministro se interpretó como un mensaje indirecto para el presidente Jair Bolsonaro y sus apoyadores, cuyas actitudes en la campaña de 2018 fueron cuestionadas en los tribunales por acusaciones de que la candidatura promovía campañas para difamar a los opositores en las redes sociales a través de noticias falsas. Al respecto, Alexandre de Moraes también hizo otras menciones que resaltan la diferencia entre la conducta irregular y el derecho a la libertad de expresión.
"La libertad de expresión no es libertad de agresión, de destrucción de la democracia, las instituciones, la dignidad y el honor de los demás. La libertad de expresión no es libertad para propagar discursos de odio y prejuicios, no permite la propagación de discursos de odio e ideas contrarias al orden constitucional y al estado de derecho, incluso durante el período de propaganda electoral”, subrayó en una manifestación contundente cuyo tono ya se esperaba entre bastidores en Brasilia.
El discurso del ministro se desarrolla en el contexto de la crisis institucional entre los Poderes Ejecutivo y Judicial, cuyos miembros han estado en el banquillo de Bolsonaro en los últimos tiempos, desde que el presidente comenzó a atacar de manera sistemática y permanente la credibilidad de la Justicia, de las urnas electrónicas y del sistema electoral adoptado en el país. La actitud del excapitán está asociada, entre otras cosas, al temor de perder las elecciones, por lo que estaría preparando el terreno para cuestionar el resultado de la votación.
La conducta de Bolsonaro provocó un endurecimiento de la postura de Moraes sobre el tema durante el último año, no solo en su actuación en el TSE, sino también en el Supremo Tribunal Federal (STF), donde el ministro preside, por ejemplo, una investigación sobre la difusión de noticias falsas. Las investigaciones comprometen al jefe del Ejecutivo y a sus hijos, por lo que el tema ha provocado una aguda y creciente disputa pública entre Bolsonaro y Moraes. En una sucesión de hechos políticos, el ministro se convirtió en el blanco principal de los ataques del mandatario al Poder Judicial.
Atención
Al discurso del nuevo presidente del TSE asistieron este martes en persona varias autoridades, entre ellas los candidatos presidenciales Luiz Inácio Lula da Silva (Partido de los Trabajadores - PT), Ciro Gomes (Partido Democrático Laborista - PDT) y Simone Tebet (Movimiento Democrático Brasileño - MDB), además de los expresidentes Michel Temer (MDB), Dilma Rousseff (PT) y José Sarney (MDB). Moraes, quien sucede en el cargo a Edson Fachin y estará al frente de la Corte hasta junio de 2024, tendrá como suplente al ministro Ricardo Lewandowski, también juramentado esa noche.
El discurso de Alexandre de Moraes en la ceremonia sigue la línea de declaraciones del magistrado en otros momentos. En junio, durante la sesión que oficializó su elección para el mando de la institución, anticipó que "la Justicia Electoral no tolerará que milicias, personales o digitales, falten al respeto a la voluntad soberana del pueblo y atenten contra la democracia en Brasil".
Diferentes personajes del mundo político escucharon atentamente el discurso de Moraes, como una forma de medir la temperatura actual de la crisis institucional, cuyos próximos capítulos estarán a cargo de la conducta del mandatario brasileño y las reacciones de la Justicia Electoral y el Supremo Tribunal Federal (STF) del país, especialmente el ministro recién nombrado.
El escenario
La llegada de Moraes al puesto más importante del TSE estuvo precedida de votaciones en el STF que señalan cómo puede ser el camino del magistrado en su nueva función. En una de ellas, en octubre de 2021, el ahora presidente de la Corte votó a favor de establecer una tesis según la cual la difusión masiva de noticias falsas a través de WhatsApp podría considerarse un abuso de poder político y un uso indebido de los medios de comunicación.
"La Justicia Electoral podrá ser ciega, pero no es tonta. Es ingenuo pensar que la red social no es un medio de comunicación social. Es el vehículo de comunicación social más importante del mundo", argumentó Moraes en su momento, defendiendo incluso que la diseminación masiva de mentiras podría resultar en la destitución de mandato. El voto del ministro se manifestó en el ámbito de las acciones que investigaron las responsabilidades de la fórmula Bolsonaro-Mourão en el envío de noticias falsas durante las elecciones de 2018.
Democracia y elecciones
Alexandre de Moraes también dedicó parte de su discurso a la defensa de la democracia y de la forma en que Brasil se organiza para elegir a sus representantes políticos. Elogió las estadísticas que ayudan a dimensionar el proceso electoral en el país, que cuenta con más de 156 millones de votantes.
"Somos una de las democracias más grandes del mundo en términos de voto popular. Estamos entre las cuatro más grandes del mundo. Pero somos la única democracia en el mundo que calcula y publica los resultados electorales el mismo día, con agilidad, seguridad, competencia y transparencia. Esto es motivo de orgullo nacional", afirmó, siendo fuertemente aplaudido por los presentes e indirectamente refutando el discurso bolsonarista de crítica a la confiabilidad del proceso electoral.
Moraes también recordó que el TSE trabaja en conjunto con los 27 Tribunales Regionales Electorales (TRE) distribuidos por todo el país. La cúpula de la Corte está formada por un grupo de al menos siete ministros, tres de ellos del Supremo Tribunal Federal, dos del Superior Tribunal de Justicia (STJ) y dos juristas designados por el jefe del Ejecutivo en base a elecciones realizadas por la clase de los abogados.
Comienza la carrera
El día que se inauguró oficialmente la campaña para las elecciones presidenciales, dos de los tres candidatos que encabezan la carrera, el expresidente Lula y el exministro Ciro Gomes, se encontraban en el estado de São Paulo, el colegio electoral más grande del país.
Lula (PT) hizo campaña en la entrada de la fábrica de Volkswagen, en São Bernardo do Campo, en el estado de São Paulo, la ciudad donde inició su vida política. Jair Bolsonaro (Partido Liberal - PL) participó en una manifestación con motociclistas en Juiz de Fora, estado de Minas Gerais, donde fue apuñalado durante la campaña de 2018.
Ciro Gomes (PDT) hizo una caminata en Guaianases (São Paulo) y habló con la población. Simone Tebet (MDB) se reunió con representantes del sector de la cultura en São Paulo.
La semana que abre oficialmente la disputa electoral también está marcada por la difusión de sondeos nacionales de opinión producidos por las dos empresas de investigación más respetadas del país: Ipec (antes Ibope) y Datafolha.
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Este lunes 15, el Ipec mostró que Lula lidera la carrera con el 44% de las intenciones de voto, frente al 32% de Bolsonaro. El candidato de PT venció a la suma de votos de sus oponentes (44% a 41%), lo que indica un triunfo en la primera vuelta. Datafolha publica sus resultados el jueves 18.
Pese al inicio oficial de la campaña, está previsto que el tiempo electoral gratuito y obligatorio transmitido por radio y televisión comience el 26 de agosto y se extienda hasta el 30 de septiembre. La primera vuelta de las elecciones tendrá lugar el 2 de octubre y la segunda vuelta, el 30 de octubre.
El ministro Alexandre de Moraes asumió como presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil la noche del martes 16 acompañado de un grupo de autoridades de los Tres Poderes y de un discurso indigesto para el ala bolsonarista. El ministro, que estará a cargo de las elecciones de este año, prometió una actuación "firme e implacable" al frente de la Corte, la máxima institución que rige todo el proceso electoral en el país.
"La intervención de la Justicia Electoral será mínima, sin embargo, será pronta, firme e implacable a fin de frenar las prácticas abusivas o la difusión de noticias falsas o fraudulentas, especialmente las que se esconden en el cobarde anonimato de las redes sociales, las famosas fake news", dijo Moraes, haciendo un guiño a las milicias digitales que actualmente están en la mira del TSE.
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El discurso del ministro se interpretó como un mensaje indirecto para el presidente Jair Bolsonaro y sus apoyadores, cuyas actitudes en la campaña de 2018 fueron cuestionadas en los tribunales por acusaciones de que la candidatura promovía campañas para difamar a los opositores en las redes sociales a través de noticias falsas. Al respecto, Alexandre de Moraes también hizo otras menciones que resaltan la diferencia entre la conducta irregular y el derecho a la libertad de expresión.
"La libertad de expresión no es libertad de agresión, de destrucción de la democracia, las instituciones, la dignidad y el honor de los demás. La libertad de expresión no es libertad para propagar discursos de odio y prejuicios, no permite la propagación de discursos de odio e ideas contrarias al orden constitucional y al estado de derecho, incluso durante el período de propaganda electoral”, subrayó en una manifestación contundente cuyo tono ya se esperaba entre bastidores en Brasilia.
El discurso del ministro se desarrolla en el contexto de la crisis institucional entre los Poderes Ejecutivo y Judicial, cuyos miembros han estado en el banquillo de Bolsonaro en los últimos tiempos, desde que el presidente comenzó a atacar de manera sistemática y permanente la credibilidad de la Justicia, de las urnas electrónicas y del sistema electoral adoptado en el país. La actitud del excapitán está asociada, entre otras cosas, al temor de perder las elecciones, por lo que estaría preparando el terreno para cuestionar el resultado de la votación.
La conducta de Bolsonaro provocó un endurecimiento de la postura de Moraes sobre el tema durante el último año, no solo en su actuación en el TSE, sino también en el Supremo Tribunal Federal (STF), donde el ministro preside, por ejemplo, una investigación sobre la difusión de noticias falsas. Las investigaciones comprometen al jefe del Ejecutivo y a sus hijos, por lo que el tema ha provocado una aguda y creciente disputa pública entre Bolsonaro y Moraes. En una sucesión de hechos políticos, el ministro se convirtió en el blanco principal de los ataques del mandatario al Poder Judicial.
Atención
Al discurso del nuevo presidente del TSE asistieron este martes en persona varias autoridades, entre ellas los candidatos presidenciales Luiz Inácio Lula da Silva (Partido de los Trabajadores - PT), Ciro Gomes (Partido Democrático Laborista - PDT) y Simone Tebet (Movimiento Democrático Brasileño - MDB), además de los expresidentes Michel Temer (MDB), Dilma Rousseff (PT) y José Sarney (MDB). Moraes, quien sucede en el cargo a Edson Fachin y estará al frente de la Corte hasta junio de 2024, tendrá como suplente al ministro Ricardo Lewandowski, también juramentado esa noche.
El discurso de Alexandre de Moraes en la ceremonia sigue la línea de declaraciones del magistrado en otros momentos. En junio, durante la sesión que oficializó su elección para el mando de la institución, anticipó que "la Justicia Electoral no tolerará que milicias, personales o digitales, falten al respeto a la voluntad soberana del pueblo y atenten contra la democracia en Brasil".
Diferentes personajes del mundo político escucharon atentamente el discurso de Moraes, como una forma de medir la temperatura actual de la crisis institucional, cuyos próximos capítulos estarán a cargo de la conducta del mandatario brasileño y las reacciones de la Justicia Electoral y el Supremo Tribunal Federal (STF) del país, especialmente el ministro recién nombrado.
El escenario
La llegada de Moraes al puesto más importante del TSE estuvo precedida de votaciones en el STF que señalan cómo puede ser el camino del magistrado en su nueva función. En una de ellas, en octubre de 2021, el ahora presidente de la Corte votó a favor de establecer una tesis según la cual la difusión masiva de noticias falsas a través de WhatsApp podría considerarse un abuso de poder político y un uso indebido de los medios de comunicación.
"La Justicia Electoral podrá ser ciega, pero no es tonta. Es ingenuo pensar que la red social no es un medio de comunicación social. Es el vehículo de comunicación social más importante del mundo", argumentó Moraes en su momento, defendiendo incluso que la diseminación masiva de mentiras podría resultar en la destitución de mandato. El voto del ministro se manifestó en el ámbito de las acciones que investigaron las responsabilidades de la fórmula Bolsonaro-Mourão en el envío de noticias falsas durante las elecciones de 2018.
Democracia y elecciones
Alexandre de Moraes también dedicó parte de su discurso a la defensa de la democracia y de la forma en que Brasil se organiza para elegir a sus representantes políticos. Elogió las estadísticas que ayudan a dimensionar el proceso electoral en el país, que cuenta con más de 156 millones de votantes.
"Somos una de las democracias más grandes del mundo en términos de voto popular. Estamos entre las cuatro más grandes del mundo. Pero somos la única democracia en el mundo que calcula y publica los resultados electorales el mismo día, con agilidad, seguridad, competencia y transparencia. Esto es motivo de orgullo nacional", afirmó, siendo fuertemente aplaudido por los presentes e indirectamente refutando el discurso bolsonarista de crítica a la confiabilidad del proceso electoral.
Moraes también recordó que el TSE trabaja en conjunto con los 27 Tribunales Regionales Electorales (TRE) distribuidos por todo el país. La cúpula de la Corte está formada por un grupo de al menos siete ministros, tres de ellos del Supremo Tribunal Federal, dos del Superior Tribunal de Justicia (STJ) y dos juristas designados por el jefe del Ejecutivo en base a elecciones realizadas por la clase de los abogados.
Comienza la carrera
El día que se inauguró oficialmente la campaña para las elecciones presidenciales, dos de los tres candidatos que encabezan la carrera, el expresidente Lula y el exministro Ciro Gomes, se encontraban en el estado de São Paulo, el colegio electoral más grande del país.
Lula (PT) hizo campaña en la entrada de la fábrica de Volkswagen, en São Bernardo do Campo, en el estado de São Paulo, la ciudad donde inició su vida política. Jair Bolsonaro (Partido Liberal - PL) participó en una manifestación con motociclistas en Juiz de Fora, estado de Minas Gerais, donde fue apuñalado durante la campaña de 2018.
Ciro Gomes (PDT) hizo una caminata en Guaianases (São Paulo) y habló con la población. Simone Tebet (MDB) se reunió con representantes del sector de la cultura en São Paulo.
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La semana que abre oficialmente la disputa electoral también está marcada por la difusión de sondeos nacionales de opinión producidos por las dos empresas de investigación más respetadas del país: Ipec (antes Ibope) y Datafolha.
Este lunes 15, el Ipec mostró que Lula lidera la carrera con el 44% de las intenciones de voto, frente al 32% de Bolsonaro. El candidato de PT venció a la suma de votos de sus oponentes (44% a 41%), lo que indica un triunfo en la primera vuelta. Datafolha publica sus resultados el jueves 18.
Pese al inicio oficial de la campaña, está previsto que el tiempo electoral gratuito y obligatorio transmitido por radio y televisión comience el 26 de agosto y se extienda hasta el 30 de septiembre. La primera vuelta de las elecciones tendrá lugar el 2 de octubre y la segunda vuelta, el 30 de octubre.
Edición: Flávia Chacon
