Con su avance ininterrumpido en los últimos 38 años, la agricultura y la ganadería ocupan en la actualidad un tercio del territorio del país. Datos recogidos por MapBiomas divulgados este viernes 6 muestran que entre 1985 y 2022, el área ocupada por estas actividades agropecuarias creció un 50%, incorporando un territorio equivalente a Mato Grosso, el tercer mayor estado de Brasil.
Casi dos tercios del avance de la frontera agrícola se debe a la deforestación para pasturas. Según el mencionado estudio, entre 2008 y 2012 hubo un decrecimiento de la sustitución de vegetación nativa por pastos, pero los niveles volvieron a subir a partir de 2013.
:: La deforestación crecerá un 22% en Brasil en 2022; la agricultura es la principal responsable según Mapbiomas (disponible en portugués) ::
Los impactos socioambientales de la actividad agropecuaria en Brasil son amplios. "La expansión de la [actividad] agropecuaria sigue implicando deforestación. Esto contribuye al aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero en el país, a la pérdida de ecosistemas naturales y su biodiversidad, impactando también en la regulación del clima y el ciclo hidrológico", afirma Julia Shimbo, coordinadora científica de MapBiomas.
"Esta expansión también suele provocar conflictos territoriales y sociales con las comunidades tradicionales e indígenas. Además, una gestión agrícola inadecuada puede provocar la degradación del suelo y la pérdida de productividad a largo plazo", añade.
En la Amazonía es donde más ha tenido lugar este proceso, especialmente en el estado de Pará. Hace cuatro décadas, la superficie amazónica que estaba ocupada por pasturas para la [actividad] agropecuaria era de 13,7 millones. En 2022, saltó a 57,7 millones.
"Todavía tenemos la pérdida de vegetación nativa en todos los biomas, con diferentes patrones de conversión. El aumento de la superficie para pasturas en la región amazónica, la cual supera la superficie del Cerrado, se relaciona con el crecimiento de la deforestación en la región de los últimos años, principalmente para el uso de pasturas", explica Shimbo. "Pero muchas de estas zonas no son productivas, y la conversión se hace para la venta de tierras que luego pueden convertirse en agrícolas".
La soja cuadruplica la superficie ocupada en la región del Cerrado
Del total de las tierras incorporadas por las actividades agropecuarias a partir de 1985 y destinadas al cultivo agrícola, prácticamente en su totalidad (96%) se producen cereales y caña de azúcar. Triplicando su área en los últimos 38 años, estos cultivos ocupan hoy el 7% del territorio brasileño.
Y la soja transgénica es el cultivo estrella. De las 58,7millones de hectáreas ocupadas por estos cultivos, 35 millones son de soja. Tan solo esta materia prima ha multiplicado por cuatro la superficie que ocupa en el país.
Aunque este proceso tiene lugar en todos los biomas, es en el Cerrado donde la soja se ha multiplicado por más de 15 en el periodo analizado. "A pesar del crecimiento acelerado en los últimos años en la Amazonía, el Cerrado representa el 48% de la superficie plantada con soja en Brasil", destaca el material de MapBiomas.
Edición: Thalita Pires