La mayoría de la población brasileña entiende que las personas más pobres son las más afectadas por los eventos climáticos extremos. Esto es lo que revela una encuesta publicada este martes 10 por Greenpeace. La encuesta fue realizada por el instituto brasileño Inteligencia en Investigación y Consultoría Estratégica (IPEC) y entrevistó a 2 mil personas, en una muestra proporcional a la realidad de la población brasileña en relación al género, lugar de residencia, clase social, educación y otros datos.
Según el relevamiento, el 62% de las personas en el país reconoce que los pobres son quienes más sufren las consecuencias de los fenómenos climáticos extremos. Otro 36% cree que pobres y ricos lo viven de la misma manera.
La encuesta mostró que, aunque para la población en general las preocupaciones por el cambio climático son menores que otras, como la salud, la educación, el desempleo y la delincuencia, para las clases D y E existe una gran sensación de inseguridad ante la posibilidad de desastres naturales.
Más aún, el estudio evidenció que la mayoría (67%) de las personas tienen poca o ninguna confianza en las autoridades públicas (especialmente las municipalidades) para prevenir o reducir los impactos de los desastres causados por los cambios. Entre las personas negras o marrones, esta tasa es aún mayor: 72%.
"Las recientes tragedias en estados de diferentes regiones de Brasil son el resultado de la falta de políticas efectivas de prevención, adaptación al cambio climático y respuesta a eventos extremos. No estamos ante un hecho nuevo o inesperado. ¿Cuántas personas más tendrán que morir o perderlo todo para que los gobernantes garanticen ciudades seguras para todas las personas?", pregunta Igor Travassos, vocero de Justicia Climática de Greenpeace Brasil.
Los encuestados también destacaron las acciones consideradas más efectivas contra los eventos extremos. La respuesta más común (del 33% de los participantes) fue la creación de mejores infraestructuras para el drenaje del agua, como zanjas, canales y túneles de alcantarillado. También hubo votos significativos a favor de mejoras en las políticas de vivienda (20%) y de saneamiento básico y limpieza urbana (19%).
En medio de una ola de desinformación, el 38% de los participantes mencionó la televisión como el medio más fiable para informarse sobre el cambio climático. Le siguen las redes sociales y los sitios web y portales de noticias, con un 13% de preferencia cada uno. Sin embargo, se citaron como fuentes confiables, con porcentajes menores, los grupos de WhatsApp, las reuniones en espacios religiosos y los blogs y podcasts.
Es posible acceder a los datos completos de la investigación a través de este enlace.
Edición: Nadini Lopes e Rodrigo Durão Coelho
