BIENES PÚBLICOS

En Brasil, un plebiscito popular terminó con 97% de votos en contra de la privatización de servicios públicos

Casi 900 mil personas participaron en la votación organizada por sindicatos y movimientos populares

Traducción: Isabela Gaia

Brasil de Fato | São Paulo (SP, Brasil) |
La gran mayoría de los participantes en el plebiscito se opuso a la privatización. - Divulgação/Sintaema

La población del estado de São Paulo se manifestó abrumadoramente contra las propuestas de privatización de los servicios públicos del gobernador bolsonarista Tarcisio de Freitas (Republicanos). El plebiscito popular organizado por sindicatos y movimientos populares dio como resultado un 97% de votos en contra de la entrega de trenes de pasajeros, del metro y de la Empresa de Saneamiento Básico del Estado de São Paulo (Sabesp).

Los resultados de la votación fueron presentados el pasado jueves (16 de noviembre), día en que la Asamblea Legislativa del Estado de São Paulo (Alesp) organizó una audiencia pública para discutir la posibilidad de privatizar SABESP. De acuerdo a información brindada por los organizadores, el plebiscito obtuvo alrededor de 897 mil votos.

Las urnas fueron distribuidas en puntos de gran circulación de ciudadanos, como estaciones y terminales de transporte público. Fueron alrededor de dos meses de implementación. Además de las votaciones, los participantes del plebiscito se unieron en una petición contra las privatizaciones para hacer entrega a las autoridades públicas.


Las urnas fueron colocadas en puntos estratégicos distribuídos por São Paulo. / Divulgación/Sintaema

El plebiscito popular es parte de una campaña de movilización que representa a los trabajadores de SABESP, del metro y de la Compañía Paulista de Trenes Metropolitanos (CPTM), que el pasado 3 de octubre organizaron un paro conjunto contra los proyectos de entrega de los servicios públicos al sector privado. Para el 28 de noviembre está prevista una nueva huelga, a la que se sumarán otras adhesiones.

Movilización y audiencia

La movilización de los trabajadores cuenta con el apoyo de diferentes sectores de la sociedad, representantes de otras asociaciones profesionales y parlamentarios. Antes del inicio de la audiencia pública de este jueves en Alesp, un acto reunió a muchas de estas personas.

"Tenemos un gobierno que odia el servicio público, que odia a los empleados públicos, que quiere transformar Sabesp en una nueva ENEL", dijo el diputado estatal Guilherme Cortez (PSOL), en referencia a la crisis de abastecimiento energético en São Paulo en las últimas semanas.

"El sector privado no es capaz de servir al interés público. Si la empresa privada tiene que elegir entre aumentar el valor de la factura u ofrecer un servicio de mayor calidad, elegirá su rentabilidad. Y la factura será cargada a la población", completó el diputado.

"Quieren privatizar SABESP porque no les gusta la gente, no les gustan los pobres, no les gustan los trabajadores", dijo Vívia Martins, miembro de la junta directiva de la CUT-SP. "En todas y cada una de las manifestaciones contra esta privatización, estaremos juntos en esta lucha. Es inadmisible privatizar el agua, que es un bien para todos y todas", agregó.

El gobierno estatal estuvo representado en la audiencia pública por Natália Resende, secretaria de Medio Ambiente, Infraestructura y Logística, quien intentó argumentar que la eventual privatización de SABESP tendrá características diferentes a la privatización de la energía eléctrica.

"Los problemas son, en general, los mismos. Las tarifas aumentan, los servicios empeoran, no se realizan inversiones, el poder público pierde el control social. Tenemos una historia de pérdida de calidad y de pérdidas en el mundo en el proceso de privatización", respondió el presidente del Sindicato de Trabajadores de Agua, Saneamiento y Medio Ambiente del Estado de São Paulo (SINTAEMA), José Faggian.

Edición: Rodrigo Durão Coelho